Anónima, Geek… bruja, guerrera, libre, liberada. Esta es la historia ficticia de mi particular guerra real.
Sé que siempre ando pidiendo disculpas por tardar mucho en contestar. Pero es lo que hay… como poco ser educada y, al menos, decirlo.
Las lluvias eran necesarias, claro que sí, pero han sido una faena terrible. Con tan mal tiempo no pude salir ni una sola tarde a cuidar mi huerta y, claro, la mala hierba vio ahí su oportunidad de crecimiento y se expandió. He estado estos días muy atareada limpiando y venga a limpiar. Lo bueno es que debajo de la jungla había sobrevivido la mitad de lo que tenía sembrado, así que no todo ha sido en vano. Y estos días he estado, eso, limpiando huerto y volviendo a sembrar. Qué paliza.
Además tenía a la perra con ansiedades varias y una codorniz moribunda. Así que también he estado liada haciendo terapia con la perra (sí tíos, aprovechando al máximo el curso que ya terminé de Adiestramiento Canino en lo que me dan y no me dan las prácticas) y haciendo de veterinaria enchufando a la pobre codorniz en cuarentena los antibióticos con una jeringuilla. Pero ya estamos todos operativos de nuevo. Así que, bien.
¿Cuánto tiempo hace que me vine a vivir al pueblo? Más de dos años (los cuento con la edad del perro que se empadronó aquí cuando yo) y todavía quedan seres humanos en este mundo que me quieren sacar de aquí. Que si la vida en el campo es muy dura, que si no vas a tener dinero para tus caprichos, que si la universidad de los niños (que ni los tengo ni los pienso tener en los próximos cuatro años), que podía tener un trabajo en una empresa en cualquier ciudad… y siempre el mismo cuento.
Sí, supongo que podría ponerme una camisa, peinarme, hacerme una manicura, presentarme en una empresa de diseño digital y tener una nómina. Luego pagaría un alquiler que se comería la mitad de mi nómina con los gastos incluidos de gas, luz, agua, comida… y me quedarían tres duros para gastarlos ¿en qué? ¿en bares? ¿en comprar ropa que no me cabe en el armario? ¿en ir al cine?
Reconozco que vivir en una ciudad es una pasada, pero también reconozco que te tiene que gustar mucho ese tipo de vida. Allí no tienes que pensar en cómo vas a hacer las cosas, porque lo único que tienes que hacer es conseguir dinero y pagarlas. Es más fácil, más entretenido (si te gusta el ocio moderno) y hay más personas.
Me he pasado toda la vida viviendo de ciudad en ciudad y he pasado por muchas y muy distintas. Y en todas echaba de menos lo mismo: la libertad para hacerme yo mis cosas a mi aire sin tener que pensar en cuánto tenía que gastarme.
Desde que vivo aquí, tengo todos los animales que quiero (alguno más) que en la ciudad no podría tener porque no hay espacio o no es legal, tengo mi propio sistema de autoabastecimiento (huerto, granja, caza, setas, aprovechamiento silvestre variado) y casi no tengo que gastarme el dinero en comer, tengo la farmacopea al pie de casa y puedo curarme sin tener que comprar pastillas porque conozco las plantas y sus propiedades, monto a caballo cuando quiero, no tengo que pagar para ir a nadar, no necesito un gimnasio… y casi se me ha olvidado para qué sirve el dinero.
Sí, vale, claro que consigo dinero para cosas básicas como: luz, gas, agua, algunos productos alimenticios que no puedo conseguir por mis propios medios, el coche, la gasolina, vacunas para los animales, internet, el móvil… pero el gasto es mínimo y apenas tengo que trabajar tres meses al año para pagar esas cosas.
El resto del tiempo vivo de vacaciones perpetuas, lo que significa que tengo nueve meses al año para desarrollar mis propios proyectos personales y hacer todas las cosas que me gustan que conllevan que no necesite el dinero. ¿Por qué dicen que es duro? ¿Porque durante un mes he ido veinte minutos a arar con el legón dos o tres días a la semana para limpiar el huerto? Uf, casi me hernio.
No, qué va. El trabajo en el campo no es duro. Lo duro es levantarte por la mañana y pensar: ‘qué tengo que hacer hoy, cómo puedo rentabilizar mi día y sacarle partido a la mañana’. Cuando tienes un trabajo fijo no tienes que pensar en eso, sólo tienes que pensar qué hacer con tu tiempo libre y con el dinero que has ganado. Así que, en realidad, lo duro depende de lo que te guste y lo que quieras hacer con tu vida, ¿no?
Arte, Ecoturismo y Desarrollo Rural Sostenible
Cultura, turismo y patrimonio histórico en Sierrade Francia y provincia de Salamanca
Creaciones
Un lugar donde sacar cómo nos sentimos y desahogarnos un poquito
"El umbral de tus sueños. Y si insistes, de tus sombras también"
Blog de relatos cortos y poesía.
Escribir es una parte distintiva de mi ser. Siempre acudo a la escritura para salir de la realidad y también para entrar y profundizar en ella. Escribiendo analizo y entiendo mejor la vida y sus persona-jes. Escribiendo me suelto, y recuerdo y fijo las memorias. Por primera vez me decido a mostrar lo que escribo: ideas, historias que tejo, que la gente me deja en su tránsito, o me hace imaginar con su actos o palabras, cosas que recuerdo a medias o apenas intuyo, invenciones, literatura procesada, escenas vividas y soñadas, recuentos de dolor y exilio, de abandono y pérdida, de mucho amor mezclado con todo lo anterior. Ojalá me encuentren, se encuentren un poco, disfruten y estos textos los hagan pensar y sensibilizarse. Gracias por leer-me.
Blog di fotografia: news, fotografia artistica, maestri della fotografia, tecnica fotografica, fotocamere, tutorial Photoshop, corso di fotografia gratuito
Recopilación de las más interesantes imágenes educativas
En ROLLORCA S.L, ofrecemos una gama completa de servicios de reformas y diseño de interiores para satisfacer todas tus necesidades. Ya sea que estés buscando una renovación completa o simplemente quieras rediseñar el interior de tu espacio, estamos aquí para ayudarte. Nos enorgullece ofrecer soluciones personalizadas para cada cliente. No importa el tamaño del proyecto, nos comprometemos a proporcionar un servicio excepcional y a garantizar tu satisfacción. Contáctanos hoy mismo para empezar a transformar tu espacio.
De todo un poco
¡Dream Big Miga!
Lo que dice la gente: